Tratamiento 

de semillas

Tratamiento de semillas

Para garantizar la uniformidad del rodal de plantas, es necesario utilizar metodologías de protección desde la siembra.

El proceso de tratamiento de semillas asegurará esta protección en los períodos iniciales de desarrollo, garantizando su potencial de germinación y el control de los microorganismos patógenos.

Hoy en día, existen varias tecnologías que garantizan soluciones viables para los procesos industriales, que incluyen pesticidas, polímeros colorantes y bioinductores.

Nuestro diferencial es aportar soluciones sostenibles capaces de mejorar la eficacia de estos productos mediante la sinergia entre los activos.

Nuestros aditivos poseen formulaciones estables con acción oligodinámica capaces de potenciar las formulaciones químicas y garantizar plántulas sanas durante todo su proceso de desarrollo sin acumular oligoelementos en sus estructuras morfológicas.

Se ha demostrado que nuestras tecnologías garantizan un aumento de la productividad y una mejora de la eficacia en la germinación.

Tratamiento de semillas: ¿qué es y por qué utilizarlo?

Se trata de un tratamiento preventivo que utiliza plaguicidas químicos y/o biológicos en las semillas.

Su objetivo es suprimir, controlar o eliminar las bacterias, hongos, insectos u otras plagas que atacan a las semillas, plántulas y plantas.

El proceso de tratamiento tiene como objetivo proteger las fases iniciales de germinación, garantizar el potencial productivo de la semilla, ayudar a su desarrollo y controlar los microorganismos patógenos.

Además, minimiza los riesgos de contaminación, ya que muchas enfermedades pueden ser transmitidas por las semillas.

Aditivos en el tratamiento de semillas

Las semillas pueden sufrir daños por enfermedades, plagas, interferencias climáticas y otros, lo que perjudica su desarrollo, su germinación uniforme y su enraizamiento.

Utilizando los aditivos de tratamiento de semillas TNS Nano se puede prevenir su aparición, eliminar o reducir el inóculo presente en la semilla.

¿Cómo funciona?

Los mecanismos de acción de nuestros aditivos se producen de tres maneras principales:

• Las nanopartículas del aditivo, actúan en la ruptura de la membrana celular de los microorganismos, adhiriéndose a los orgánulos responsables del transporte de alimentos y la respiración celular, y al ADN y ARN de los patógenos, impidiendo su replicación y duplicación. Por lo tanto, el aditivo tiene el potencial de contribuir a la reducción de enfermedades y ayudar a proteger la planta contra las acciones patógenas.
• El aditivo mejorará el desempeño de la planta al asistir eficazmente el proceso de transporte de electrones en el cloroplasto, aumentando la capacidad fotosintética y estimulando sus mecanismos de autoprotección.
• Tiene un efecto sinérgico con numerosas moléculas comerciales, presentando una mejora en la eficacia de los agentes defensivos utilizados en el proceso de TSI.

 Excelencia en los resultados

En pruebas preliminares sobre semillas in natura, el aditivo colaboró hasta en un 80% en la eficiencia de la germinación y en el control de incidencias de hongos del suelo como:

• Fusarium spp
• Rhizopus
• Macrophomina phaseolina

Estos patógenos pueden reducir drásticamente el rendimiento de las plantas en algunas regiones productoras.

Beneficios del uso de aditivos para el tratamiento de semillas

• Ayuda a controlar los microorganismos patógenos (hongos y bacterias)
• Reduce los riesgos de contaminación cruzada en nuevas áreas;
• Actúa como activador de enzimas;
• Estimula los mecanismos de autoprotección de la planta;
• Máxima eficiencia de germinación de la semilla de forma segura y sostenible;
• Efecto sinérgico y mejora de la eficacia de agentes defensivos asociados en el proceso;
• Reducción de pérdidas y aumento de la productividad.
• Aumentos de productividad de hasta un 30% en cultivos como: soja, maíz y trigo.

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